El Isabella Paradiso no tiene un lugar, ni tampoco una época. Está abierto desde todos los tiempos, nunca puede estar cerrado para servir a todas las almas que acaban de pasar a un mundo mejor. Allí van a parar las almas que no quieren un descanso o no pueden tenerlo, las almas impuras.
Su dueña (yo) le tiene tanto miedo a la muerte que se comprometió a regentar este antro y servir copas a todos estos desgraciados para no sentir nunca la sensación de echar el último aliento.
Si quieres encontrarlo primero tienes que dejar este mundo y cuando camines por la ardiente autopista antes de cruzar las puertas hacia el infierno verás este humilde bar de copas.
Si deseas sentir un poco esa sensación infernal éste es tu sitio, tu decides: El cielo lleno de viejos o una eternidad jovial y sin descanso.

Muérete y pasa por aquí a tomarte una copa ;)

Bienvenido al Isabella Paradiso.

Cocaine.

Todos tenemos secretos. Los salvadores de la patria, las personas que procuran nuestro bien, los que se creen héores y en los que llegamos a creer se sientan por la noche en sus ordenadores a ver pornografía infantil. Muy machos todos ellos levantando sus enfermizos miembros para lograr la consumación de su enfermizo mundo cuando creen que nadie les ve. Aquellos/as que se acuestan felices pensando que han tenido un motivo suficiente esta vez para partirle la cara a su mujer u hombre (puntualizo: nosotras, en vez de partir la cara mas bien somos de partir el alma poco a poco).
¿Nos quejamos de que el mundo se va a la mierda? No me extraña, la peor guerra no es la que vemos en la tele si no la que tenemos con los que nos rodean.

-Ésta es una puta.
-Aquél es un cabrón.

El mundo es como la cocaína, todos somos puros y blancos pero luego escondemos esa euforia, los vicios. Cuando nuestra madre nos decía de pequeño: no toques esto, no hagas eso. Y todavía nos entraban más ganas .
Aunque digamos que ya nada nos sorpende, mentira. Nos morimos y nunca llegamos a conocer a la persona que está a nuestro lado, ni las reacciones que puede tener y cuando la espicha nos llegan las interminables preguntas de por qué hizo aquello o lo otro.
¿Y lo bueno que es uno después de muerto? Cuando está vivo contamos los días para ver si revienta pero luego mucho llanto recordando sus virtudes. En fin.

Como dice una canción de los Doors: Cancela mi suscripción a la resurreción.
Así no tengo que encontrarme con los mismos hijos de puta hasta después de muerta.


2 comentarios:

  1. Cuánta razón, hija mía! Me encanta la frase "Cuando está vivo contamos los días para ver si revienta pero luego mucho llanto recordando sus virtudes", porque es totalmente cierta. Yo no sé qué tiene de malo no llorarle a uno que la ha diñado con razón. Quizás no me alegre, pero tampoco me da pena, y si enumero sus virtudes será después de haber enumerado sus defectos. Que aquí, el que la hace, la paga, y punto. Pero si es que la gente está deseando de que te salgas de la norma para apuntarte con su dedo acusador y tirarte piedras como aquel que está libre de pecado (como Rodd y Todd Flanders)... ¡Que les den a todos! xD

    P.D.: Qué bien escribes, joía!

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  2. Normal que el mundo vaya como va, si esque el 90% de la población son unos hijos de puta, que solo van a joder a los demas, y ahi si estoy de acuerdo contigo Ruth, Que les deeeeeeeeen!!! XD, que nosotros haremos siempre lo que nos de la gana sin pensar en el puto que dirán, siempre y cuando no jodamos a nadie que no lo merezca, todo hay que decirlo jajaja

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